miércoles, 3 de junio de 2009

IMAGENES DE AMOR



¿COMO CONQUISTAR A UNA MUJER?

En el siguiente artículo veremos algunas recomendaciones de expertos y psicólogos en el ámbito de las relaciones, orientadas a conquistar a una mujer en particular. Es importante tener en cuenta que para el amor y las relaciones no existen reglas fijas, y todas las personas reaccionamos distinto ante un inminente romance; lo que si podemos ver son actitudes que generalmente ayudan a establecer una relación, y el lenguaje corporal asociado en la otra persona que nos indica que vamos por buen camino.
Para comenzar, lo principal es no generar expectativas demasiado elevadas, y considerar el hecho de que no podemos "obligar" a alguien a enamorarse de nosotros. Aunque suene divertido, se recomienda una actitud tipo "zen", es decir de atención relajada; de esta manera estaremos más sueltos y no sufriremos grandes decepciones si no nos aceptan.
Al conocer a una persona que nos gusta, y durante los primeros pasos al establecer una relación, podemos fijarnos en ciertas características del lenguaje corporal, lo que nos puede revelar si estamos siendo correspondidos. Por esto comenzaremos nuestro artículo de cómo conquistar a una mujer, con los siguientes tips o datos útiles.
La mirada: Estudios señalan que en una conversación ocasional entre dos personas, estas se miran entre un 30% y un 60% del tiempo. Cuando alguien nos gusta, miramos a la otra persona aproximadamente un 75% del tiempo. Si una mujer nos mira constantemente mientras conversamos, es una buena señal de que le gustamos. Se especula que el mirarnos de manera sostenida además estimula la producción de fenetilamina en el cerebro, lo que en parte nos da las sensaciones físicas de la atracción, como la sensación de bienestar, el aumento en la frecuencia de los latidos del corazón y la transpiración de las manos, por ejemplo. Esta sustancia está también presente en el chocolate, por lo que no es sólo un mito que este nos hace sentirnos bien.
Las manos: El exponer las palmas hacia afuera mientras nos estamos expresando o al estar sentados, y mostrarlas a la otra persona es una señal de apertura
Los pies: Al apuntar con los pies hacia adentro o hacia delante la otra persona sin quererlo puede estar delatando que le gustamos; por lo menos que esta interesada en la conversación. El apuntar con los pies, manos y/o ojos hacia otro lugar es una clara indicación de no estar involucrado o atento al momento presente.
Los hombros: Cuando una mujer levanta ligeramente los hombros al conversar con nosotros también si quererlo nos envía una señal de interés. También el levantar momentáneamente las cejas en las primeras miradas es una buena indicación.
Cuerpo en general: Si la mujer se inclina hacia delante en el asiento al conversar también nos entrega una señal inconsciente de interés. Además, en el proceso de conquistar a una mujer, si le gustamos ella demostrara cierto nerviosismo, tocándose los botones de la ropa, la cara, y se arreglara constantemente el pelo con las manos. Como podemos ver, los seres humanos revelamos bastante con este lenguaje o idioma corporal.
En la primera cita o reunión, por supuesto que es necesario conversar y entrar en confianza para poder abrirnos a la otra persona, lo que no siempre es fácil. El nerviosismo nos puede jugar una mala pasada en la etapa inicial, por lo que una buena idea es comenzar la cita con una invitación al cine. Después podremos comentar sobre la película y de esta manera abriremos el espacio para una conversación más íntima. Es mejor llevar la primera cita de una manera ligera, sin insinuaciones y terminar la salida en términos de amistad
Formar una relación con una mujer, como con todas las cosas que valen la pena, toma tiempo, por lo es conveniente terminar la primera cita en términos de amistad, sin insinuaciones mayores. Se debe dar tiempo a la relación y no presionar mientras se intenta conquistar a la otra persona. Durante este período nos podremos conocer y mostrarnos nuestras aficiones, pensamientos y sueños, siendo honestos y abiertos; todos tenemos cosas interesantes acerca de nosotros mismos. Los regalos y elogios siempre son bien recibidos, mientras no se exagere o se insista demasiado; las flores son apreciadas enormemente por toda mujer, y para este tipo de regalo u otro, no importa el precio sino la intención. Una sola flor puede ser el detalle ideal; son comunes las rosas rojas para conquistar, pero hoy en día esto es flexible y depende del gusto de cada uno.
Otra recomendación importante en el proceso de conquistar a una mujer es el espacio en la relación que se está formando. Esto no significa que vamos a ignorar al otro a intervalos regulares, sino que se refiere a permitirle a la pareja realizar otras actividades y tener su propia vida fuera de la relación.
Las recomendaciones expuestas en nuestro tutorial de como conquistar a una mujer, como ya nos habremos dado cuenta, también son aplicables a mujeres que buscan conquistar a un hombre, ya que no somos tan distintos después de todo y las relaciones se construyen entre los dos. Este artículo no pretende ser una guía definitiva sobre el tema, sino que más bien un recopilación de recomendaciones que nos pueden ayudar a conocernos un poco más, tanto al hombre como a la mujer.

la pareja del momento ¿silvestre dangon?

El amor de los dos

martes, 2 de junio de 2009

beneficios de una buena pareja sentimental

BENEFICIOS
en la actualidad muchas personas se ven benefeficiada a la hora de tener una buena relacion con la pareja adecuada, una pareja sentimental no es solo de tener sexo no?, una pareja sentimental es aquella personana que con parte los buenos, malos y hasta regulares ratos de la vida, es una amiga, esposa, amante, la cual con uno comparte el resto de su vida, unos de los principales beneficios que identificamos son:



  • ser una buena persona


  • tener buenas amistades


  • crir bien asus hijos


  • obtener una optima cononfianza entre si mismo


  • sinceridad


  • respeto


  • amor


  • humildad
¿Como mejorar la vida en pareja?

Existe hoy en día un elevado numero de parejas que tienen problemas en su relación, llegando a ser causa de numerosas rupturas. Veremos el porqué de estos conflictos y cómo mejorar la relación de pareja.

En toda relación de pareja el amor pasa por una serie de etapas, que van desde el amor pasional y enamoramiento hasta la madurez.

Sin embargo, a lo largo de este periodo las crisis aparecen en algunos momentos, esto es muchas veces inherente a la convivencia, y también a los malos entendidos. Es el empeño y el esfuerzo por parte de los dos, lo que hace que estas situaciones difíciles se superen y mejore la convivencia.

2. ¿Por qué se producen los conflictos?

Las crisis en la pareja, en muchas ocasiones son la causa de muchas rupturas. Son muchos y variados los motivos que producen crisis en toda relación:

- Falta de interés por la vida del otro. A veces uno de los componentes de la pareja se vuelve egoísta, está metido en sí mismo, solo busca satisfacer sus necesidades y deseos y no se preocupa por las de su pareja.

- A veces uno tiene la sensación de que no recibe del otro la misma cantidad de afecto que el o ella está dando, en este caso se puede llegar a vivir la relación como injusta.

- Creer que una vez se ha conquistado al otro u otra ya nunca se irá de nuestro lado, y se dejan de hacer esfuerzos por resultar atractivos e intentar cuidar de la relación día a día, se descuidan los detalles, la comunicación, el diálogo, etc.

- Descargar el mal humor y los malos momentos en el otro.

- Problemas de comunicación. Es decir, no saber como expresar sentimientos tanto positivos como negativos, no saber escuchar, no resolver problemas que afectan a los dos, etc.

- Pretender que el otro adivine nuestros pensamientos y deseos. Esto es difícil si no se expresa abiertamente.

3. ¿Cómo mejorar la vida en pareja?

- En primer lugar es fundamental tener una predisposición a superar cualquier dificultad. No huir de los problemas e intentar afrontar todas las dificultades juntos.

- Aceptar al otro como es, asumir que nadie es perfecto y sobre todo, no intentar cambiarle. A veces dedicamos mucho tiempo intentando que el otro u otra cambie, y esto es un error ya que nadie puede cambiar a nadie hasta que tome esa determinación de hacerlo, pero nunca por imposición.

- Buscar actividades comunes para compartir. Esto no quiere decir que haya que estar siempre juntos, ni renunciar a los propios gustos en beneficio de los de otro, pero si tener proyectos e ilusiones comunes. De esta forma se acaba con la rutina y el aburrimiento que a veces llevan a la pareja a necesitar llenarse de ilusiones al margen del otro. Esto es en definitiva, desarrollar esa capacidad de aportar novedades a la relación.

- Cuando se tiene un mal día, no se debe descargar el mal humor sobre la pareja. Si intuimos que va a ser así, tal vez sea mejor que nos tomemos un tiempo para estar a solas, reflexionar y dejar que pase ese mal humor.

- Poner interés en atender las necesidades del otro. La mayoría de las parejas tienen dificultades porque se preocupan más de atender sus propios intereses y deseos aunque ello suponga desatender a la pareja.

- Expresar sentimientos positivos, es decir, valorar y reconocer al otro, expresar elogios, sentimientos de afecto, resaltar sus éxitos. A veces las parejas se acostumbran demasiado pronto a lo bueno que puede estar ofreciéndole una determinada relación, llegan a verlo normal y no saben apreciar ni observar lo bueno que hay en el otro. Es importante no solo apreciarlo sino también reconocerlo y en ocasiones comunicárselo al otro.

lunes, 1 de junio de 2009

SENTIMIENTOS DE PAREJAS

La expresión del afecto es uno de los aspectos fundamentales de la vida de pareja y en cierto modo define la opción de vivir juntos. Por lo general un hombre y una mujer hacen su opción de vivir en común en base a la necesidad de estar juntos y de expresar su amor.

En la medida que la relación va asentándose prevalecen las manifestaciones de afecto pero surge un nuevo universo de experiencias afectivas: el ser padres. Así las manifestaciones de afecto (besos, caricias, actos de ternura entre ambos), que tanta importancia tienen para la vida de la pareja, deben además ser compartidas con la expresión de afecto hacia los hijos. Los actos de ternura y amor del uno hacia el otro no sólo son importantes para la pareja sino que constituyen un modelo de relación que genera gran seguridad y confianza en los hijos. Ello además fomenta un aprendizaje de formas de expresar afecto propias para cada familia.

Las expresiones de amor y afecto constituyen un lenguaje común entre los miembros de la pareja, que permite que cada uno externalice sus emociones y sentimientos. Esto genera una mayor profundidad y confianza entre ambos. Los espacios de comunicación afectiva son fundamentales para la pareja y permiten además mejorar la vida sexual, ligándola a la afectividad.

Nuestra cultura es bastante crítica con la expresión de los sentimientos (como por ejemplo el afecto), que suele asociarse a debilidad o impulsividad, restándole importancia a este tan vital aspecto de la vida en pareja. Es importante rescatar que la expresión de sentimientos y emociones, lejos de ser un signo de debilidad, significa fortaleza. Es en cierto modo un símbolo de la entrega hacia el otro, es exponerse ante el otro mostrándole lo más íntimo de uno.

Además de l afecto la pareja se expresa una infinidad de emociones y sentimientos. La rabia es una de las emociones que frecuentemente cuesta expresarla abierta y directamente ya que pocas personas son capaces de comunicar su rabia haciéndose cargo de ella. Por lo general las personas tienden a responsabilizar al otro y a “culparlo” de su enojo:¡..Tú me haces enojar..., me sacas de mis casillas..” .Así en la pareja se evita hablar de los enojos por temor a generar una pelea y un quiebre, aunque sea momentáneo, con el otro. Estas rabias se acumulan y van generando un muro de tensión y distancia que va afectando la cercanía afectiva entre los integrantes de la pareja y que muchas veces termina en una sensación de soledad y vacío en el espacio de encuentro, ya que son tantas las cosas de las que no se puede hablar, que ya casi no se habla